El municipio de Paredes de Nava (Palencia) ha acogido del 29 al 31 de agosto el II Congreso Agua, Arte y Vida. Canal de Castilla, un espacio de encuentro entre ciencia, cultura y sostenibilidad en torno al valor de este histórico enclave. Fundación Global Nature, representada por su director Eduardo de Miguel, ha participado en un apartado destacado dedicadas a naturaleza y biodiversidad, un espacio que ha permitido poner en el centro del debate la urgencia de conservar paisajes tan singulares como las estepas ibéricas y los humedales asociados al Canal.
Durante su intervención, De Miguel ha explicado que los cultivos herbáceos extensivos y las estepas ibéricas “albergan una riqueza biológica de valor incalculable”. Según sus palabras en ellos se encuentra el 100% de la población europea de alondra ricotí, más del 90% de la ganga ibérica, el 50% de la avutarda mundial, el 70% del sisón o el 60% del cernícalo primilla, entre otras especies relevantes. “Estas cifras evidencian que el futuro de la biodiversidad europea depende, en gran medida, de la conservación activa de estos paisajes”, ha añadido De Miguel.
El Director de Fundación Global Nature ha destacado también las herramientas innovadoras que ya se están aplicando para garantizar esa conservación: desde programas de barbechos diseñados para favorecer la reproducción del sisón y la ganga, hasta proyectos de custodia del territorio en colaboración con más de 300 propietarios privados en 16.000 hectáreas de La Mancha. Además, ha recordado la importancia de los instrumentos financieros privados y públicos como los créditos de biodiversidad, los pagos por servicios ambientales o los fondos de compensación de huella hídrica, que permiten a empresas y administraciones invertir en restauración y obtener resultados medibles y verificables.
Los humedales, íntimamente ligados al Canal de Castilla, también han sido otro de los ejes destacados. Fundación Global Nature recordó su experiencia en la restauración de más de 34 humedales en España, incluyendo la Laguna de la Nava, “un ejemplo pionero de gestión que combina restauración, regulación hidrológica y pastoreo extensivo como herramientas de conservación y adaptación al cambio climático”.
Con esta participación, la Fundación refuerza su mensaje: conservar y restaurar estepas y humedales no es solo proteger especies, sino también asegurar servicios ecosistémicos esenciales (la producción de alimentos hasta la mitigación del cambio climático) que sostienen la vida de las comunidades rurales y urbanas.
Tal y como ha concluido De Miguel, “la restauración ecológica y el manejo sostenible del territorio son soluciones viables y necesarias: cuidan la biodiversidad, dinamizan el medio rural y fortalecen la resiliencia frente a incendios y fenómenos climáticos extremos”.
1 septiembre, 2025