La operación de la semana en el sector legal ha sido el anuncio de la futura fusión de la firma británica Ashurst y la estadounidense Perkins Coie para crear un nuevo gigante de la abogacía mundial llamado Ashurst Perkins Coie.
El resultado, una firma con unos 3.000 abogados, presencia en 23 países y unos ingresos combinados estimados de 2.700 millones de dólares.
Se trata de la tercera fusión transatlántica en tres años, tras la de Herbert Smith Freehills y Kramer Levin –Herbert Smith Freehills Kramer desde junio de 2025– y la de Allen & Overy y Shearman & Sterling –A&O Shearman desde mayo de 2024–.
Nuestro socio director global, Marc Gericó, analiza esta cuestión en un reportaje exclusivo de Cinco Días.
«Es algo más que una operación corporativa; es otro síntoma claro del nuevo orden legal global«. El mercado, analiza Marc, «está viendo cómo se forma una liga de grandes firmas transatlánticas que buscan escala real, cobertura geográfica integrada y especialización sectorial en áreas estratégicas como tecnología, energía, infraestructuras y servicios financieros».
«La consolidación de un mapa global de la abogacía donde 20–25 firmas competirán por las operaciones más complejas»
«Ya lo vimos este verano con la unión de McDermott Will & Emery y Schulte Roth & Zabel, una operación que reforzó esta corriente. Pero la combinación Ashurst–Perkins Coie es especialmente reveladora porque acelera tres grandes tendencias: la consolidación de un mapa global donde 20–25 firmas competirán por las operaciones más complejas -como ya se dijo en los Legal Marcom Awards-; el contraste cada vez más marcado entre modelos de escala y modelos de enfoque (especialización, agilidad y proximidad al cliente); y la necesidad de que los socios evolucionen hacia un rol de ‘arquitectos’ de operaciones internacionales, no solo ejecutores jurídicos».
En este sentido, Marc Gericó afirma que «todo apunta a que esta ola continuará: los clientes demandan eficiencia, equipos multidisciplinares y presencia real en múltiples jurisdicciones».
«Las firmas que quieran competir en ese escenario deberán reforzar su estrategia, clarificar su posición y decidir con precisión qué tipo de jugador quieren ser en este nuevo tablero global».