Hacienda aplaza un año la entrada en vigor del sistema Verifactu - AECIM. Asociación de Empresas del Metal

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El Gobierno ha decidido posponer un año la aplicación obligatoria de Verifactu, el nuevo sistema de facturación electrónica desarrollado por la Agencia Tributaria para reforzar el control y la trazabilidad de las operaciones comerciales. La medida amplía los plazos inicialmente previstos en 2026 y otorga más tiempo al tejido empresarial para completar su adaptación tecnológica.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, anunció la aprobación del real decreto ley que formaliza esta prórroga durante la reunión del Consejo de Ministros celebrada este martes. Según explicó, el objetivo del aplazamiento es facilitar la digitalización de los procesos de facturación en empresas y profesionales.

Nuevos plazos para pymes y autónomos

Con la nueva calendarización, las pequeñas y medianas empresas deberán implementar Verifactu a partir del 1 de enero de 2027, mientras que los trabajadores autónomos dispondrán de un plazo adicional hasta el 1 de julio del mismo año.

El sector tecnológico llevaba semanas alertando del elevado nivel de carga y de la dificultad de muchas empresas para adecuar sus sistemas dentro del calendario inicial. La extensión del plazo es interpretada como un respiro para los equipos que ya estaban inmersos en la actualización de herramientas y procesos.

Cómo funciona Verifactu

Verifactu supone una transformación profunda en la emisión y registro de facturas. El sistema exige que cada documento incorpore un código QR y un identificador HASH que enlaza cada factura con la anterior, formando una cadena cronológica e inalterable. Esta estructura impide modificar o eliminar facturas una vez emitidas y obliga, en caso de rectificación, a generar una nueva factura sustitutiva que deje constancia de la operación.

El código QR permite además verificar que cada factura se encuentra registrada en la Agencia Tributaria, reforzando la transparencia y la trazabilidad del proceso.

La obligación de utilizar este modelo afecta a todas las empresas y autónomos en España, excepto a quienes ya emplean sistemas como SII, TicketBAI, el sistema de Navarra o quienes están exentos de emitir facturas.

Un año adicional para adaptarse al nuevo marco digital

Con este aplazamiento, las pymes y autónomos españoles ganan un año para integrar las nuevas exigencias tecnológicas que marca Hacienda. El objetivo es garantizar una transición ordenada hacia un sistema de facturación más seguro, automatizado y alineado con los estándares digitales que la administración implantará de forma definitiva en 2027.

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