La ropa interior, normalmente, permanece oculta. Sin embargo, las prendas que componen esta categoría son de las más utilizadas a diario. Por tanto, también son piezas que desechamos más rápida y frecuentemente. Sin embargo, pocas veces pensamos en calcetines, calzoncillos, bragas y sujetadores como parte de nuestro armario sostenible, cuando su cuidado puede marcar una gran diferencia en el impacto ambiental de nuestro consumo textil.
Al igual que sucede con el resto de prendas que utilizamos, cada año la ropa interior se convierte en toneladas de residuo textil. ¿Cómo podemos evitar un desgaste prematuro fruto de un mal cuidado? Además de ser un acto de responsabilidad con el medio ambiente, cuidar la ropa interior también es una forma de consumo consciente.
Con el objetivo de crear una guía completa de cuidado de la ropa interior, hemos hablado con Lara Quetglas, fundadora de talk under light, marca de ropa interior de algodón orgánico; y con Sandra Sarmiento, fundadora de Ecometas, tienda de lencería sostenible de Barcelona.
¡Toma nota de estos consejos de experta y cuida tu look desde la capa más íntima!
Cortesía de Ecometas
Guía de cuidado de la ropa interior para que dure más tiempo
“El modo en que cuidamos nuestra ropa interior tiene un impacto enorme: en la vida útil de las prendas, en nuestra salud y en el planeta”, advierte Sandra Sarmiento. “Al lavarlas de forma respetuosa, no solo reducimos residuos y minimizamos la liberación de microplásticos, también apostamos por un consumo más consciente, donde se pone en valor lo que ya tenemos en nuestro cajón de la ropa interior”.
¿Qué errores cometemos frecuentemente en el cuidado de la ropa interior?
La forma más fácil de aprender a lavar la ropa interior de forma respetuosa es, en primer lugar, siendo conscientes de los errores que cometemos frecuentemente en este sentido. Según las expertas:
“El suavizante, por ejemplo, es algo totalmente prescindible, que contamina, estropea la ropa más rápido y se utiliza muchísimo”, comenta Lara Quetglas, de talk under light. ¿Alternativas? “Un poco de vinagre de limpieza ecológico en el compartimento del suavizante para desinfectar y, si se quiere, se le puede poner, para que huela mejor, unas gotas de algún aceite esencial natural”. Y añade: “Algo que siento que estropea mucho la ropa también es el centrifugado, ya que todo el movimiento que se genera con centrifugados altos hace que los acabados y fornituras de las prendas se puedan estropear antes. También las altas temperaturas, que hacen que el tejido tenga un desgaste más rápido ya que el lavado es más agresivo. Y la secadora, por supuesto, que hace que las prendas se estropeen mucho más rápido”.
Para Sandra Sarmiento, de Ecometas, “algunos errores típicos son lavar con agua demasiado caliente, ¡más allá de los 40 grados es un delito! Usar detergentes agresivos o suavizantes, y meterlo todo junto y mezclado, en la lavadora y sin protección. Todo eso puede acortar muchísimo la vida útil de la ropa interior”.
Ahora sí, toma nota sobre cómo lavar, secar y almacenar la ropa interior correctamente para alargar su vida útil.
Consejos para lavar la ropa interior de forma correcta
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Si utilizas lavadora: agua fría o tibia (máximo 30ºC), ciclos cortos y una bolsa de lavado para evitar que los tejidos se deterioren
Lara Quetglas añade “con un centrifugado suave y a poder ser en un programa delicado. Y lavar cuando sea realmente necesario. Las bragas y calcetines sí que se lavan más a menudo, y los sujetadores y las camisetas quizá también, dependiendo de la sudoración y el olor corporal de cada uno, pero hay veces que lavamos prendas que no necesitan aún un lavado. Es importante no hacer las cosas por inercia y estar presentes en cada acción”. Para la fundadora de Ecometas es fundamental “agua fría (como máximo 30º), jabón neutro y una bolsita de algodón (si puede ser orgánico para minimizar los tóxicos ya sería lo ideal), para proteger las prendas durante el lavado”. Y en cuanto a frecuencia, “cada 5 o 6 usos en el caso de sujetadores, y siempre, cada vez, después de hacer ejercicio o sudar mucho”.
Elige jabones neutros o ecológicos, sin químicos agresivos ni perfumes intensos
Para la fundadora de talk under light, “es imprescindible utilizar detergentes naturales que no sean tóxicos ni para el medioambiente ni para nuestra piel. No somos conscientes de que los detergentes dejan restos y luego nos ponemos esas prendas cada día, y en nuestras zonas más íntimas. Es muy importante proteger la piel ya que es el órgano más extenso -y la primera barrera que nos protege del exterior, también la que recubre los genitales externos- para mantener un buen equilibrio del pH, no alterar la microbiota y no facilitar las infecciones”.
Lava a mano siempre que puedas, especialmente las prendas delicadas que incluyan encajes, tejidos finos o técnicos, o tratamientos especiales
“El lavado a mano es siempre más cuidadoso -explica Sandra Sarmiento (Ecometas)-, ideal para prendas con encajes, tejidos calados o tul. Sin embargo, hoy en día la gran mayoría de prendas de lencería sostenible también resisten perfectamente el lavado a máquina si se hace con mimo (bolsa, programa corto y sin centrifugado agresivo). Con respecto a los tejidos, a menudo se nos olvida lo importante que es leer las etiquetas de cuidado de las prendas, y así seguir las recomendaciones específicas según el tipo de tejido. Ese simple gesto puede darnos la clave para mantener en perfecto estado nuestras prendas. ¡La información es poder!”.
En cuanto al cuidado del color, Lara Quetglas añade algunas claves: “Yo trabajo con tintes naturales y estampaciones florales. En estas prendas, lavando a mano suavemente en frío y con un jabón ecológico consigues que el color aguante mucho más. Esto siempre sin frotar agresivamente o retorcer la prenda”.
Cortesía talk under light
Consejos para secar la ropa interior de forma correcta
Aunque la secadora nos ahorra tiempo, lo cierto es que las altas temperaturas que maneja pueden provocar un desgaste prematuro de la ropa íntima. “Secar al aire libre es siempre la mejor opción: natural, sin gasto energético y mucho más respetuoso con las fibras”, coincide la fundadora de Ecometas. “La secadora, en cambio, consume mucha energía y puede estropear el elástico, deformar la prenda o encoger el tejido. Mejor tender en horizontal para evitar que se deformen, en un tendedero doméstico o con la clásica cuerda, pero siempre a la sombra”, añade. Una exposición prolongada al sol directo puede desgastar los colores y debilitar los tejidos si mantenemos esta costumbre en el tiempo.
Consejos para guardar la ropa interior de forma correcta
Una vez seca -nunca la guardes húmeda-, retira la ropa interior del aire libre y dobla las prendas con cuidado. Clasifícalas por tipo y evita hacer montones muy apretados. “Siempre ordenando nuestras piezas con amor, la energía es otra”, comenta Lara Quetglas. “Dobla con mimo, guarda por separado y, si puedes, evita que estén apretadas contra broches, cremalleras u otras prendas que puedan engancharlas. Un cajón aireado o pequeñas bolsitas de tela pueden ayudarte a conservarlas mejor”, añade Sandra Sarmiento.
Otro tip: utiliza organizadores específicos para que las prendas no se deformen, sobre todo si tienen estructuras rígidas. Importante: mantén el espacio limpio y seco para prevenir la aparición de moho o insectos.
¿Cómo se pueden proteger las prendas de ropa íntima más delicadas? “Tejidos como el encaje o la seda requieren cuidados especiales. Para protegerlos, es importante evitar la exposición prolongada a la luz solar, la humedad y el roce con superficies ásperas. Utilizar bolsitas de tela para almacenarlos puede ser una buena opción para preservar su integridad y que duren muchísimos años”, aporta Sandra Sarmiento.
Izquierda: Tienda – Estudio de talk under light en Montgat (Barcelona). Atención con cita previa (Imagen cortesía de talk under light). / Derecha: Tienda Ecometas. Calle Lluna, 1. Barcelona (Imagen cortesía de Ecometas).
¿Cuándo hay que renovar la ropa interior?
La principal señal se produce cuando vemos que los materiales ya no cumplen su función. “Las fibras van poco a poco dándose de sí y llega un momento que se pueden ir rompiendo. Pero este proceso debería ser lento y progresivo. Y el momento de renovarlas para mí sería cuando consideras que no te está acompañando esa pieza como debería, porque quizá las gomas ya no sujetan o el tejido se ha ablandado mucho”, comenta Lara Quetglas.
Antes de renovar, valora si la pieza se puede reparar
Hay pequeños desperfectos -como una costura abierta o una goma floja- que no son motivo suficiente como para desechar una prenda. Como sucede con el resto de piezas de nuestro armario, realizando pequeñas reparaciones podemos alargar la vida útil de las prendas más íntimas, sin necesidad de desecharlas. “Algunas prendas se pueden donar a proyectos de reciclaje textil o incluso reconvertir en trapos suaves para limpiar”, añade Sandra Sarmiento. “¡Todo antes que acabar en el cubo de la basura! Y más si ha sido una prenda que te ha acompañado durante mucho tiempo. ¡Dale un final bien digno!”, defiende.
Cómo renovar la ropa interior de forma más sostenible
Como habrás podido imaginar, una buena forma de hacerlo conscientemente es eligiendo marcas éticas que utilicen tejidos sostenibles. Esto dicen las expertas:
Para Lara Quetglas, “es muy importante invertir en tejidos que sean naturales y ecológicos”, explica. Su consejo obedece a motivos no solo éticos, sino también de salud: “Usar fibras y tintes naturales asegura que se encuentran libres de componentes químicos, tóxicos y disruptores endocrinos que se absorben fácilmente por la piel y mucosas, y esto nos ahorra problemas en la piel y en la salud íntima.”
Sandra Sarmiento también tiene en cuenta los tejidos y acabados que favorecen una mayor durabilidad de la ropa interior: “Los materiales naturales como el algodón orgánico y los tejidos como el modal (Tencel), bien cuidados, pueden durar muchos años si los tratamos con mimo. Los acabados de calidad, las costuras planas, los hilos y elásticos de calidad también marcan la diferencia”. Y, en cuanto a gustos, añade: “Que la prenda sea bonita, saludable y esté alineada a tus valores es genial, pero además, tiene que ser fundamentalmente cómoda y adaptarse al cuerpo, para darle realmente un buen uso y amortizar la prenda pasado el tiempo. Solo así repetiremos experiencia de modo satisfactorio”.
Cuando las prendas de ropa interior ya no sirven, ¿qué hacemos con ellas?
Si tienes en mente alguna idea de upcycling o reciclaje creativo, ¡manos a la obra! También se pueden utilizar, sobre todo los calzoncillos de tipo boxer, por ejemplo, como trapos de limpieza. En el caso de que finalmente hayas decidido desechar estas prendas de ropa íntima, no las tires directamente en el cubo de la basura. Busca el contenedor Moda re- más cercano o deposítalas en un contenedor de residuo textil para que sean recicladas.
Moda re- cuenta con una red de más de 8.500 contenedores de recogida de ropa usada repartidos por toda España. Las prendas deterioradas que ya no se pueden utilizar se destinan al reciclaje de ropa, transformándose en nuevos materiales o productos textiles, promoviendo la sostenibilidad y cerrando el ciclo de reciclaje de ropa.
