Harta de Netflix: el fallo de una sociedad completa

Spoiler asegurado: se recomienda ver la película antes de leer este artículo. Harta no es solo una película. Es un espejo incómodo. Y también es un grito de auxilio que muchas mujeres están cansadas de reprimir. Podría comenzar con una frase que fuera: Nunca imaginé que mi vida sería así.

Netflix nos trae una película escrita y dirigida por Tyler Perry y protagonizada por Taraji P. Henson, que encarna a Janiyah Wiltkinson como una madre soltera completamente exhausta y nos lleva a reflexionar sobre el desafío que supone la crianza autónoma llevada al límite sin ninguna ayuda.

Harta es el título (Straw, en su idioma original) de esta muestra cruda de una realidad dolorosa y que, en lugar de ir de una mujer vaga que llega tarde a su trabajo, o que asesina a su asaltante y a su jefe y luego va a robar a un banco, trata de trauma con t minúscula y T mayúscula. El trauma con t minúscula es repetido, constante, lleva al desgaste emocional y racional.

¿De qué trata Harta?

Janiyah es una madre soltera, sin apoyo familiar y con una relación complicada con su madre y hermana. Una mujer sobreviviente que tiene dos trabajos precarios y paga sola todos los gastos económicos. Con las dificultades económicas que se van sumando, no tiene cobertura médica, y es la falta de seguridad social la que la hace incapaz de cubrir totalmente el tratamiento necesario para mejorar la salud de su hija.

Esta nació en un centro público y, según la protagonista, con un trato muy deficiente, con violencia obstétrica, y debido a las complicaciones que se produjeron durante el parto, Aria, la hija, sufre convulsiones que, a su corta edad, han mermado su calidad de vida y que le obligan a acabar ingresando en salas de urgencias hospitalarias.

La niña tiene 8 años, por lo que deducimos que lleva 8 años criando sola, con el estrés de los horarios para llegar a todo, la dificultad de poder pagar todos los gastos (vivienda, coche, hospital, medicinas, alimentación en el colegio y en la casa, gas, luz, etc.), la sensación de fallar como madre, la soledad… son factores que retratan la dura realidad de millones de mujeres.

Quizás por esto, en redes sociales, una frase se ha repetido tanto que ha sido considerada como la reseña definitiva del filme: “Netflix nos rompió a todos”.

La realidad de muchas mujeres

Súmale al caso de Janiyah el desafío diario al que millones de madres solteras se tienen que enfrentar a causa de la precariedad laboral, el abuso de poder de los mandos, las agresiones de jefes o clientes, la falta de descanso adecuado debido a la presencia de vecinos que no respetan el horario de reposo, la falta de seguridad social y, especialmente, la ausencia de una red de apoyo.

Un día cualquiera, Janiyah se levanta y hace su rutina acompañando a su hija al cole y luego corriendo para llegar al trabajo. Ahí la historia llega al extremo de la sobrecarga y todo comienza cuando tiene que salir con urgencia del supermercado y su jefe le grita, una vez más. Un llamado de la escuela, la intervención de los servicios sociales, la falta de dinero para pagar el comedor de la niña, un accidente vial y ser despedida de su empleo rompen a Janiyah, quien, tras verse envuelta en circunstancias violentas en la tienda de donde fue echada, intenta cobrar sin éxito el cheque de su finiquito en el banco al que va porque es el único lugar donde alguien le ha ayudado.

El estrés por la indiferencia de algunos empleados del banco, por el cumplimiento de las normas a rajatabla, por la incomprensión y una confusión llevan a Janiyah a retener a clientes y trabajadores, luego de que las autoridades fueran alertadas de un supuesto asesinato y un posterior asalto al banco.

La representación del trauma en la película Harta

A partir de ahí solo ves el trauma (T-t) que ha vivido toda su vida, que se ha programado en su historia familiar y que ha desencadenado un evento tan doloroso que lleva a Janiyah a la única respuesta posible: la disociación.

Esta es una historia sobre el trauma tan profundo que experimenta la mente de una mujer que, de por sí, ya está sobrecargada y que ante un evento de una gran intensidad solo le queda desconectarse de la realidad para sobrevivir.

Disociación: una estrategia de la mente para vivir a pesar del dolor

Pierre Janet, médico y psicólogo, ya a finales del siglo XIX hablaba del “estrechamiento del campo de conciencia” y de “disociación” como una consecuencia inevitable del trauma cuando este supera las posibilidades de afrontamiento de la situación.

En el momento en que la persona vive en soledad un evento inesperado y dramático, sufre lo que en biodescodificación se llama un conflicto biológico. El dolor del instante distorsiona nuestra percepción de la realidad, nos deja atrapados en la reactividad, dificulta nuestra capacidad de estar presentes y disponibles en nuestras relaciones, influye en nuestra forma de ver el mundo y en nuestras interacciones con los demás.

Janet describió en 1894 que, para que exista el trauma, tiene que haber una experiencia sorpresiva, estresante, que sobrepasa a la persona, y que el impacto de esta vivencia impide su procesamiento y su posterior narración. Eso es lo que le ocurre a Janiyah, pero te das cuenta cinco minutos antes de que acabe la película.

El trauma es la herida resultante de una experiencia tan intensa o dolorosa que se vive como una amenaza para la vida o el bienestar físico o emocional. Cuando lo que ocurre es demasiado para poder procesarlo, puede dejar una huella profunda y afectar seriamente la forma en que vivimos, causando síntomas que interfieren con la vida diaria.

Insisto: El trauma con T mayúscula lo vemos al final de la película, por eso sería interesante que antes de seguir leyendo la veas o te perderás la sorpresa de la cruda realidad de Janiyah.

A partir del momento en que intervienen las fuerzas policiales, es Kay Raymond (Teyana Taylor), la detective asignada al caso, la única en sospechar que Janiyah no es peligrosa, que no ha cometido ningún crimen de manera voluntaria, que no es una homicida ni pretende ejecutar un robo en el banco reteniendo a personas. Son las similitudes con su pasado y presente las que llevan a la detective a establecer un vínculo para intentar hallar una solución pacífica. Es su propia historia la que activa la empatía y compasión.

¿Qué es la disociación y por qué ocurre tras un trauma?

La disociación es la reacción natural cuando el dolor de una experiencia es tan intenso que la mente se protege creando una realidad alterna.

Es una forma que tiene la mente de protegerse cuando vivimos algo tan fuerte o doloroso que nos desborda. Es como si una parte de nosotros se “desconectara“ para poder seguir funcionando. En vez de sentir o recordar todo lo que está pasando, la mente separa ciertos recuerdos, emociones o sensaciones para poder sobrevivir al momento.

Esta desconexión puede ocurrir sin que nos demos cuenta, y aunque nos permite seguir adelante, esos fragmentos pueden seguir influyendo en nosotros desde el fondo, sin que sepamos bien cómo. 

Cuando una experiencia traumática no se procesa bien, los recuerdos no se guardan como una historia coherente en nuestra memoria. En lugar de eso, se quedan sueltos, como piezas rotas: imágenes, sensaciones físicas, emociones intensas o reacciones automáticas. Esto puede generar síntomas como:

• Lagunas en la memoria (amnesia).
  
• Reacciones emocionales muy intensas o desproporcionadas.
  
• Conductas repetitivas relacionadas con el trauma.
  
• Sensación de estar desconectado de uno mismo o del entorno.

El Manual de Diagnóstico DSM-V (2013) describe dos reacciones disociativas frecuentes: despersonalización y desrealización. Estas experiencias pueden durar desde unos minutos hasta mucho más tiempo, y pueden repetirse a lo largo de la vida si no se tratan.

• Despersonalización: es sentirse extraño o desconectado de uno mismo. Por ejemplo:
  
  • Sentir que estás viendo tu vida desde fuera, como si flotaras sobre tu cuerpo.
    
  • Sentir que no controlas lo que haces o dices, como si fueras un robot.
    
  • Notar que tu cuerpo se siente raro o no te pertenece.
    
• Desrealización: es sentir que el mundo que te rodea no es real. Algunos ejemplos:
  
  • Ver a las personas o al entorno como si estuvieras dentro de una película.
    
  • Sentir que estás separado del mundo por una especie de vidrio invisible.
    
  • No sentirte emocionalmente conectado con tus seres queridos.
    

También puede aparecer lo que se llama amnesia disociativa, que es la dificultad para recordar cosas importantes, especialmente relacionadas con la experiencia traumática. No es que se te olviden por descuido, sino que la mente las bloquea para protegerse.

Para entender esto, es útil saber que tenemos dos tipos de memoria:

• La memoria implícita: guarda imágenes, sensaciones físicas, emociones y respuestas automáticas.
  
• La memoria explícita: guarda hechos, historias y significados.

En la disociación, estas memorias no se integran bien. Algunas partes pueden estar separadas y otras no. En el momento del trauma, este mecanismo es una forma de defensa que ayuda a la persona a sobrevivir. Pero con el tiempo, si no se procesa, esta desconexión se vuelve un obstáculo. Lo que sirvió para protegernos puede terminar impidiendo que sanemos.

La disociación de Janiyah

Esta es la historia sobre una madre en duelo. La protagonista, Janiyah, parece estar viviendo un día más con su hija, haciendo la agotadora e inevitable rutina. La vemos moverse, hablar, actuar como si nada hubiera pasado. Janiyah ve a su hija, habla con ella, la baña, la lleva al colegio, la abraza… Sin embargo, todo es una ilusión creada por su cerebro para evitar enfrentarse a lo insoportable.

Solo al final descubrimos la verdad: su hija Aria murió la noche anterior a causa de una convulsión, todos lo saben excepto ella.

Harta nos muestra a una madre que, incapaz de soportar el dolor, entra en un estado de disociación. Hay traumas que son tan dolorosos que el cerebro no los puede enfrentar de golpe.

Janiyah no está loca, desquiciada ni es violenta o capaz de actuar con violencia. No trata sobre una mujer descontrolada, sino de una persona a la que su cerebro le está protegiendo del trauma y está sobreviviendo como puede, en soledad, con un esfuerzo mayúsculo continuado.

Trata sobre una mujer atravesando un trauma intenso ante una realidad que la rompió, invisibilizada en su dolor, completamente sola, cargando el peso de la maternidad, la pobreza y el duelo.

Y es ahí cuando Janiyah, enfrentada a la indiferencia y el juicio de la sociedad, debe confiar en personas a su alrededor, algo que nunca antes había considerado posible, y se asombra. Se sorprende cuando otras mujeres le comprenden, le apoyan y le aseguran que la seguirán respaldando, incluso cuando tenga que asumir la responsabilidad de los hechos.

Preguntas frecuentes sobre la película Harta