Tras meses y años de protestas, de llevarse las manos a la cabeza y, lo que es más extraordinario, de hablar del TAV en las comidas familiares de los domingos, Maitane ha decidido dar un paso más y apuntarse a la Plataforma Pro TAV de Navarra. Al fin, parece que la sociedad navarra empieza a tomarse en serio eso de que la comunidad se iba a quedar sin tren, igual que se quedó sin autovía con Madrid o sin vuelos.
Maitane ya le cuenta a su pequeña Irati que, con suerte, aunque quizá no antes de que termine la universidad, podrán viajar toda la familia junta en tren de alta velocidad desde Pamplona al resto de España. Como ya hacen sus primos de Oviedo y Sevilla, pronto también los tíos de Almería, y, si hay suerte, incluso la abuela que vive en Bilbao.
Ya en marzo Maitane comentaba con su padre, Julián, que parecía que empresarios y otros muchos colectivos se habían unido para crear una Plataforma que reclamara la llegada del Tren de Alta Velocidad a Navarra. Julián, que de esto sabe, suele recordarles a sus hijos, Maitane y Javier, que si alguien tiene que tener interés en mejorar las comunicaciones en Navarra, estos deben ser los empresarios. Aunque, en su opinión, quien de verdad debería liderar ese impulso por el progreso es el Gobierno foral, que representa a todos los navarros y navarras… incluso a quienes todavía defienden seguir viajando “en tartana”.
Hace unos días, por fin, apareció por Pamplona un alto cargo del Ministerio, el Comisionado para el TAV, que se reunió con el Gobierno foral y con la Plataforma Pro TAV. Veremos si esta vez sirve para algo. Maitane, que aún cree en el poder de hablar claro al Estado y exigir lo que corresponde, siente que algo se está moviendo. Como dice su padre, no se pueden recuperar los quince años perdidos con el TAV en Navarra, pero si hay interés y compromiso por las partes, se puede acelerar todo lo que queda, que no es poco.
Según les han contado, si se mantiene el ritmo actual de las obras supondría tardar otros cincuenta años en terminarlas. Sin embargo, si se lo toman en serio, agilizando proyectos y obras de verdad, quizás la conexión con Zaragoza podría ser una realidad hacia 2040. Ahí es nada. Por eso Maitane se ha apuntado a la Plataforma Pro TAV (plataformaprotav.cen.es). Le parece una buena iniciativa y, sobre todo, una forma de implicarse como ciudadana para lograr cosas positivas. Y piensa animar también a su familia y amigos a unirse porque sabe que luchando, exigiendo, hablando y negociando es como se consiguen los avances. Más aún en un lugar tan pequeño como Navarra, donde la unión y una voz común son esenciales para que, de una vez por todas, nos escuchen y nuestra voz llegue a los que tiene que llegar.